con el tiempo contado

Viernes 20 de febrero del 2009 a las 8:00 p.m.

Cap. 3  “di la verdad Bianca”

Estaba recostada en mi cama, observando el sobre  que me había dado Damian con los pasajes, los sacudí un poco para que salieran todos y una hoja de papel salió volando del sobre, la hoja estaba en el suelo, yo solo la observaba, hasta que me decidí a tomarla, la abrí  y comencé a leerla.

“Querido diario:

Hoy Damian ha estado triste y llorando, le pidió a mamá unos extraños pasajes de avión, el me dijo que Danielle tenía cáncer y que ella es su mejor amiga, yo le pedí a mamá un boleto más y ella me lo dio, claro, teniendo una mamá que es jefa de una aerolínea como me lo iba a negar, bueno ese no es el punto, el punto es que quiero estar con Danielle hasta el fin, porque yo se que ella y mi hermano se quieren mucho, y una amiga de mi hermano es amiga mía :).

Bianca.”

Terminé de leer eso y  fui al cuarto de mi mamá.

-hola mami.-dije dulcemente sentándome al lado de ella, ella leía un libro.

-¿qué sucede princesita?.-dijo sin desviar la vista de su libro.

-¿puedo ir mañana a Londres?

-¿mañana?

-si

-¿Cómo conseguirás un boleto para mañana? ¿Y sin un adulto?.-me acurruque con ella y le di el sobre que me había dado Damian.

-¿¡quien te dio esto!?

-Damian

-pero… ¿cómo?

-su mamá trabaja en una aerolínea

-haa! ¿Con quién piensas ir?

-Joy, Damian, Tess, Saley, Bianca y… por supuesto tu mamá

-pero solo tienes 6

-yo sé algo que tu no.- dije quiñándole el ojo

-ok, te dejaré ir, pero ¿y tus estudios y los de tus amigos?

-yo seguiré estudiando en un mes, si me salvo, claro está.

-y ¿ellos?

-ya veremos, algo se nos ocurrirá, diles a mis hermanas que empaquen y tu también mamá.

-está bien cielo, llámales a tus amigos y pasamos en la mañana por ellos.-fui a mi habitación y la observé lentamente, me di cuenta de que era la habitación de una pequeña niña, que esa habitación tenia tantos recuerdos, fotos del primer día de clases con Joy y Damian, llamé a Joy.

-“alo” ¿qué pasa amiga?

-hola Jo, quería ver si quieres ir mañana a ¡Londres!

-¡haa! ¡Claro! Espera voy a pedir permiso, pondré el altavoz para que escuches todo, pero no hables, ¿ok?

-ok.-ella puso el altavoz y fue al cuarto de su madre adoptiva.

-hola

-pequeña, que lindo que vengas, ven tapate.

-Lucy

-por favor, dime mamá

-lo siento, todavía no me acostumbro, mamá, ¿puedo ir con Danielle a Londres?

-¿Cuándo?

-mañana

-¿¡mañana!?

-si

-¿cuánto tiempo te irías?

-no lo se

-¿Por qué quieres ir hasta Londres con ella?

-¿no recuerdas?

-¿Qué?

-tal vez solo tenga un mes más con ella

-está bien, puedes ir, sabes que te amo y que jamás te dejaré sola princesita.

-lo sé mamá, voy a empacar, Danielle va a venir por mí en la mañana, te quiero mucho y gracias por todo, en cerio.- le dio un beso y se encaminó a su habitación, llego y gritó.-¡si me dejaron!

-¡lo sé, qué emoción!

-te veo mañana.

-bien, le diré a Damian

-voy a empacar, ¡besos!.-colgó y llamé a Damian

-¿Danielle? ¿Qué pasa? ¿Estás bien?

-sí, ¿por qué no habría de estarlo?

-no lo sé, lo siento.

-no te preocupes… oye una pregunta…

-¿si?

-¿irías a Londres mañana conmigo?

-¡claro! Solos o ¿con quién más?

-con mis hermanas, mi mamá, Joy, presiento que tu hermanita, tu y yo.

-¿Por qué mi hermana?

-no lo sé, lo presiento… pídele premiso a tu mamá ¿si?

-claro, ya vengo

-¡espera! Pásame a tu hermana plis

-está bien.-el me pasó a Bianca y se fue a pedir permiso.

-hola Dani

-hola Bianca

-¿qué pasa?

-encontré una hoja de diario tuya

-emm… ¿Cómo?.-dijo algo nerviosa.

-sí, lo que escuchas  pequeña.-¿sabes algo de tu hermano que no sepa yo?

-emm… no

-di la verdad Bianca

-no diré nada adiós.-ella estaba a punto de colgar cuando alcancé a gritar.

-¡espera!

-Mande

-supongo que querrás ir a Londres con nosotros

-¡claro!

-bien pásame a tu hermano por favor.

-bien.-ella me pasó a Damian.

-¿Qué paso? ¿Qué te dijo?

-que si

-mañana en la mañana paso por ti ¿va?

-claro

-ve y empaca, nos vemos mañana

-bien

-Te quiero mucho

-yo a ti, hasta mañana.-colgue, me dirigí con mi mamá y le dije que a todos los habían dejado, le dejé el teléfono, empaqué, me recosté en mi cama y solo dije:

-Tarde o temprano Bianca me dirá la verdad.